lunes, 29 de septiembre de 2008

Un diagnóstico de lo que puede esperar México frente al torbellino financiero del vecino estadounidense (Tomado de la revista PODER).

martes 23 de septiembre de 2008

El coletazo de Wall Street
Expertos ofrecen a PODER un diagnóstico de lo que puede esperar México frente al torbellino financiero del vecino estadounidense.
Por Rafael Carballo / Redaccion PODER

En los últimos meses, Wall Street, el centro financiero mundial por antonomasia, ha sufrido una reorganización sin precedentes a consecuencia de duros golpes que han azotado a varias de sus instituciones importantes. Algunos de los más arrogantes ejecutivos de Nueva York acaban por aceptar que hay inmunidad para muchos pecados, pero no cuando son tan generalizados en el otorgamiento de créditos.Dada la importancia de Estados Unidos en la economía internacional, esta situación puede afectar el orden económico de todo el orbe, pero principalmente de la economía más dependiente de la Unión Americana: México. Un asunto más que se suma a la de por sí compleja agenda mexicana, con problemas de inseguridad –agravada con atentados terroristas– y la falta de reformas en rubros económicos clave.El tobogán financiero ya tiene su historia. En marzo, el banco de inversión Bear Stearns se vio envuelto en una caída libre que culminó con medidas desesperadas de la Reserva Federal de Estados Unidos (conocida como Fed) y finalmente con la compra de la institución a un precio muy por debajo de su valor por parte de JP Morgan Chase.Ése era el primer aviso de los reacomodos que vendrían a patentizarse este mes, con el colapso del banco de inversión Lehman Brothers, fundado hace 158 años, en la quiebra más estrepitosa de los últimos años. Y eso no era todo. La prestigiosa firma de correduría Merrill Lynch fue súbitamente adquirida por Bank of America, en una transacción accionaria de 50,000 millones de dólares.De los cinco principales bancos de inversión que había hace un año, dos fueron comprados (Bear Stearns y Merrill Lynch) y uno desapareció (Lehman), lo que deja vivos sólo a Goldman Sachs y Morgan Stanley. Los sobrevivientes no están precisamente en jauja, aunque sí libraron por ahora el temporal. En el caso de Goldman Sachs, registró una caída de 70 por ciento en sus ganancias del tercer trimestre fiscal: de los 2,850 millones de dólares reportados el mismo lapso del año pasado, ahora sumó apenas 845 millones. Por su parte, Morgan Stanley reportó una ganancia neta de 1,430 millones de dólares en su tercer trimestre, lo que representa un descenso de siete por ciento respecto de lo conseguido el mismo lapso de 2007, resultado que, sin embargo, superó las expectativas de Wall Street. Al cierre de esta edición, The Wall Street Journal reportó que Morgan Stanley estaba en pláticas con el banco Wachovia y al menos otro más para una posible fusión y con ello detener la caída de su acción.La inestable situación de Wall Street se desató con los problemas en el mercado hipotecario en Estados Unidos, que empezaron a vislumbrarse el año pasado. Con inversiones en hipotecas subprime o de alto riesgo, los bancos pusieron en peligro su capital. “Las instituciones financieras son muy frágiles. Su capital es el 10 por ciento de la institución, y lo demás está apalancado”, expresa Rafael Amiel, director regional para América Latina de la firma estadounidense de análisis económico y financiero Global Insight.Al tratar de paliar el temporal que se avecinaba, a principios de este mes el gobierno estadounidense decidió rescatar las financieras hipotecarias Fannie Mae y Freddy Mac, con el objetivo de estabilizar el mercado hipotecario, lo que, esperaban, ayudaría al repunte económico. Pero apenas la semana pasada, el gobierno de aquel país anunció otro rescate de emergencia: AIG, una de las aseguradoras más grandes del mundo, recibiría un préstamo de unos 85,000 millones de dólares. Así, el gobierno quedó en posición de controlar la empresa, un hecho calificado por muchos como insólito.

EQUILIBRIO DE PAPEL
Esta crisis, aunada a la desaceleración económica mundial, pone a Wall Street en una situación delicada. Aunque podría no haber tocado fondo todavía. “No hemos visto el final aún, la lista de quiebras potenciales es larga”, vaticina Alfredo Coutiño, economista senior para América Latina de Moody’s Economy.com, el brazo de investigación y análisis de la calificadora homónima. “La bancarrota de Lehman Brothers es el aperitivo de lo que viene –acompaña en su opinión Chris Whalen, vicepresidente y gerente de Institutional Risk Analytics en Nueva York–, el plato fuerte son los bancos”.La perspectiva no es halagüeña, según los expertos. “Pensar que esto se terminará pronto sería más un deseo que una realidad”, opina Nathaniel Karp, economista jefe para Estados Unidos de BBVA, quien agrega que “no apostaría a que hubiera una recuperación sino hasta el próximo año, cuando el precio de la vivienda se normalice. Ésta es una condición necesaria para la recuperación en otros mercados porque la referencia del precio de otros activos son los precios de las casas”. El mismo Karp coincide en que la crisis podría seguir en dirección de los bancos comerciales, “que ya están siendo afectados por el mercado prime, ya no sólo el subprime”.Otras voces profundizan en esta preocupación. Porque, no obstante los rescates gubernamentales, la bolsa de Nueva York sigue cayendo, lo cual “evidencia que prevalece un contexto de incertidumbre de los mercados para ver qué otro gran banco sigue”, apoya Adolfo Huerta González, académico de posgrado de la Facultad de Economía de la UNAM. El investigador agrega que aunque en una crisis financiera los primeros en salir son los bancos pequeños, ahora no ocurrió así. Para Huerta ello es resultado de la lógica flexible del sistema de regulación financiera, que permite al gran sistema bancario hacer lo que quiera. Para este analista Estados Unidos vive ya “una recesión con inflación”.“Es la recesión más seria desde 1930”, dice Whalen desde su oficina neoyorquina del Institutional Risk Analytics. Vaticina, junto con otros colegas suyos, que tal estado de cosas se prolongará un par de años más.

OLA EXPANSIVA
En virtud de la estrecha relación entre México y Estados Unidos, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, reconoció finalmente que la crisis que vive el país vecino impactará de manera negativa a México, afectando su crecimiento en 1.6 por ciento del PIB.Varios analistas consultados opinaron precisamente en ese tenor. Aunque con ciertos matices, la coincidencia es que habrá golpes a la economía nacional. Los más optimistas creen que no afectará directamente, aunque sí de forma sesgada. “Dadas las condiciones de las economías de la región, las repercusiones no deberían sentirse de inmediato, sino paulatinamente”, dice Amiel, de Global Insight. “El sistema financiero mexicano no está expuesto a los instrumentos financieros que estaban contaminados en el mercado estadounidense”, apuntó en entrevista Nora Lustig, economista y autora del libro México: Hacia la reconstrucción de una economía.Para Rodolfo Campuzano, vicepresidente de comité de análisis de la Asociación Mexicana de Intermediarios Bursátiles y director de análisis de la casa de bolsa Invex, el sistema bancario mexicano está bien resguardado. “En nuestro país la dinámica [bancaria] es otra, por eso no habrá repercusiones en este sentido. Ni quiebras de bancos ni gobierno que deba rescatarlos”.Para Coutiño, de Moody’s, el efecto económico de esta crisis –hasta ahora financiera– será directo si hay un efecto en la economía estadounidense. “Eso todavía no lo sabemos. Si la cadena de quiebras de otros bancos y aseguradoras continúa y se hace más larga, meterá en un problema a la economía estadounidense”. En ese caso, agrega, veríamos una desaceleración más profunda y definitivamente le pegaría a México y al mundo. “Ahora no se sabe y se espera que el problema sea eso, sólo financiero, y que pueda detenerse a través de rescates estratégicos”, supone. Sin embargo, José Coballasi, presidente de consejo técnico del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), señala que la actual situación impactará al país por la restricción del crédito que necesariamente reducirá el consumo y, como consecuencia, afectará a la baja las exportaciones mexicanas. Sin embargo, supone que la economía mexicana se verá afectada, pero en forma menos importante que antaño, en virtud de que el mercado interno hoy es más amplio en términos de servicios y bienes a producir para consumo nacional. Por ello, desde su punto de vista, es necesario fortalecer las industrias de construcción, servicios y turismo.Huerta González de la UNAM, no se limita al citar escenarios menos relativos. Para él, lo peor para México sería una caída en las exportaciones, menores ventas, menor entrada de capitales, aumento de tasas de interés y freno de la actividad económica, y por tanto concluye que los efectos secundarios serían el incremento en el desempleo, un mayor índice delictivo y de inseguridad.

EN LA BOLSA
Menos en la academia y más en la trinchera del manejo de dinero ajeno, para Jorge Hernández, asesor en el fondo de inversión de GBM, la situación en Wall Street ha hecho que desde noviembre muchos clientes de su empresa y de otras sociedades de inversión hayan huido de la renta variable (es decir, la que se basa en acciones de la Bolsa Mexicana de Valores y otros mercados bursátiles) y se refugien en la renta fija de los valores gubernamentales.“Los que continúan en renta variable es porque su horizonte de inversión es de largo plazo, mínimo un año, y hasta tres”, dice Hernández, quien identifica el actual como un buen momento para comprar debido a los bajos precios de los papeles bursátiles, aunque reconoce que pocos clientes tienen el ánimo para hacerlo precisamente en este momento. “Las cosas están demasiado calientes”, señala.Coutiño, de Moody’s, percibe que hay una ola de pánico con un efecto inmediato, el cual se ve en la caída de los valores de la bolsa mexicana y en una subida en el tipo de cambio. La volatilidad continuará en las próximas semanas por los riesgos de nuevas quiebras y “eso mantendrá el nerviosismo de los mercados”, dice.Hernández apunta que ante la desbandada en las bolsas del mundo, los clientes eligen el cobijo de papeles como Cetes, Udibonos y Bonos de regulación monetaria, que están pagando una tasa promedio de seis por ciento. Aquellos inversionistas que no pudieron salirse antes de noviembre de 2007 de la bolsa, y que desesperados atestiguan pérdidas mes a mes en sus estados de cuenta, verían como una bendición tal ganancia. (Hay instituciones bancarias como Banco Azteca que dicen pagar ocho por ciento, pero en realidad es de 7.15 neto y es una inversión a 365 días, no semanal.)En el gremio financiero que maneja día a día las carteras de inversión, hay la percepción de que Guillermo Ortiz y el Banco de México tomaron la decisión correcta en la contención de la inflación. “En todo caso, el problema no son las hipotecas como en el caso de Estados Unidos, sino las tarjetas de crédito; ha crecido mucho la cartera vencida y no se puede perder de vista ese riesgo”, dice Hernández.Por su parte Carlos Ponce Bustos, director de estrategia bursátil de Casa de Bolsa Ixe, señala que el impacto en la economía real y financiera de México por lo sucedido en Nueva York resulta muy negativo por lo incierto de su magnitud y profundidad. “Seguimos sin saber qué tan mal está la cartera de las instituciones financieras”, coincide Amiel, de Global Insight.Ponce Bustos precisa, refiriéndose a septiembre, que “fueron 200,000 millones de dólares hace una semana para las hipotecarias y [el gobierno estadounidense] ya le metió 85,000 millones a la aseguradora American International Group [AIG], y van más de 200,000 millones de dólares de liquidez inyectados al mercado en estos días. Ese dinero lo tendrá que pagar alguien al final del día, lo que implica un déficit fiscal en Estados Unidos junto con una contracción económica”.Esto empieza a tener implicaciones difíciles para México. El estratega bursátil de Ixe explica que el impacto se verá en la reducción de exportaciones, algunas presiones en los ingresos y problemas de desempleo en empresas directamente relacionadas con el mercado exportador hacia Estados Unidos.Ponce Bustos es uno de lo que piensa que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), puede deslizar el nivel de su Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) en los 22,000 puntos, lo cual ya a nadie parece sonar descabellado. “La bolsa puede ser atractiva –dice–, pero es una oportunidad condicionada a que el inversionista esté líquido (es decir, que se haya salido a tiempo del mercado) y que tenga perspectivas de largo plazo, porque parecería que [la crisis] durará por lo menos hasta fines de 2009”.Desestima Bustos, sin embargo, una desbandada de inversión extranjera. “No la hay; lo que sucede es que septiembre es un mes estacionalmente difícil, porque la mayoría de los fondos internacionales hace el cierre de sus libros fiscales, limpian portafolios y venden papeles, por lo que este mes puede tener una combinación de desánimo y cierre de carteras”. El directivo de Ixe señala que lo que aún no se ha descontado para los reportes de las empresas para fin de año, es que el riesgo país se encuentra en 260 puntos. “Ello, independientemente del nivel de confianza que implica, tiene un impacto en el modelo de valuación de las compañías, pues emitir deuda tendrá un costo más caro”.

CUCHARADA DE REALISMO
Para Whalen, de Institutional Risk Analytics, México debe suponer que no habrá crecimiento económico en Estados Unidos y que de hecho la economía puede achicarse durante un par de trimestres, dada la contracción del sistema bancario, factores que abatirán la actividad económica. Whalen señala lo incontrovertible: lo peor para México es la esperada caída en la demanda de los consumidores estadounidenses. El sector productivo nacional lo resentirá. “El consumo de Estados Unidos caerá y con ello la demanda de muchos productos latinoamericanos. En el caso de México, también hay que señalar el asunto de las remesas, las cuales bajarán”, apuntó Amiel, de Global Insight.Enrique Bravo, analista para Latinoamérica de Eurasia Group, en Washington, dice que si esto deriva en una crisis económica de mayores dimensiones, yendo más allá del mercado financiero, la repercusión sobre México sería mayor mediante dos vías: la desaceleración de la economía estadounidense y los precios de las materias primas en general, y del petróleo en particular, “sobre todo en el contexto del cálculo para el precio del petróleo en el presupuesto de 2009”. La economista Lustig coincide: “Hay que ver qué pasará con el precio del petróleo, porque puede seguir bajando. Habría que ver qué tan realista es el promedio que se usó para el presupuesto del año próximo”.Es el momento preciso de mantener los pies en la tierra. Según Amiel, de Global Insight, la base para que México, y todos los países latinoamericanos, puedan sobrellevar la crisis son las reservas internacionales. En este sentido, apunta que México debió de ahorrar más aprovechando los precios del petróleo para librar más fácilmente esta situación. El analista, con todo, es optimista y considera que no habrá una crisis severa.Huerta González, de la UNAM, es menos moderado en su diagnóstico. Dice que el gobierno mexicano requiere un cambio drástico en la política económica. “Es necesario incrementar el gasto público, revisar la movilidad de mercancía. La actual política económica nos lleva a depender más de la entrada de capitales y esto acelera el proceso de extranjerización. No tenemos condiciones internas ni externas; el escenario es catastrófico (…) La actual política económica nos deja en mayor vulnerabilidad”, expresa el académico.Luis Sandoval Ramírez, del Instituto de Investigaciones Económicas de la misma UNAM, encuentra luz y sombra. México, dice, se salva de la caída en esta crisis financiera gracias a las –también menguadas– remesas venidas de Estados Unidos y a los altos precios del petróleo. Sin embargo, agrega, en un cierto plazo las consecuencias podrían ser negativas. “Pienso en un año, cuando estaríamos viendo tasas negativas de nuestra economía”.Por ello hay que revisar con atención todos los frentes. Cuidar las inversiones y procurar que vengan más del exterior. Porque, si bien las causas de la crisis provienen precisamente de fuera, Ponce, de Casa de Bolsa Ixe, apunta que debemos cuidar al extremo la estabilidad con una imagen de seguridad en el país, por lo que hechos como las explosiones terroristas en Morelia ponen a los grandes grupos internacionales de inversión en una actitud cuidadosa al observar las posibilidades de retorno en nuestro territorio.De lograr que los flujos de inversión productiva sigan llegando, México podría sortear la crisis sin que haya una recesión, manteniendo el crecimiento, aunque a un ritmo menor al de los últimos años.

viernes, 26 de septiembre de 2008

Inseguridad

hola!!!! se dan cuentas hasta donde estamos llegando , no es justo, para la capital del estado, que esto pase aqui! ya fueron a plaza museo! a comprar peliculas! vaya! yo no apoyo la pirateria pero tengo que admitir que aveces es conveniente comprar peliculas piratas,por akello del precio! pero s verdad las peliculas que estan vendiendo en plaza clavijero y museo . ya tienen un seño de los unicos, osea los z , hasta donde hemos llegado y comoe sque permitimos esto, lo digo mas que nada por el gobernador , antes para mi fidel herrara beltran era un jemploa seguir pero con esto q ue desilucion, los propios z se estan apoderando del estado , y hasta estan construyendo un monopolio d peliculas piratas,como e s posible. ojala y podamos tomar conciencia de esto y eso nos lleve a nosotros como futuros economistas , ser unos profesionistas con valores , espero que corazon que esto se termine pronto por que la delincuencia , esta muy pesada , y la verdad en vez de prosperar vamos de mal en peor! se los dejo asu criterio! ...... por cierto vean la pelicula de rec! osea grabar ! esta buenisisma.

Jois Marlen
5a generación.

martes, 23 de septiembre de 2008

Tiempos Electorales...

Hola mis estimados cuasi-economistas, (término acuñado por una querida amiga que por motivos de seguridad omitiré su nombre), el motivo de este paper, es el exhortarlos a que le den seguimiento a las actividades que en nuestra facultad se realizan, nos hemos enterado de que en fechas próximas saldrá la convocatoria para elegir a nuestros representantes de generación y nuestro consejero alumno, nuestro interés por escribir es también el informarles lo siguiente: hace ya dos años que no tenemos alternancia en la consejería, esto desde luego que nos ha afectado al grado de quedarnos sin voz ni voto ante el consejo técnico de nuestra entidad académica, por lo tanto esta nueva convocatoria es recibida con mucho ánimo entre todos; así que nuestro más grande objetivo es impulsarlos hacia una democracia y una sucesión en la consejería y en los representantes alumnos, nuestro Estatuto es claro al decir que cada año tenemos el derecho de escoger a las personas que serán nuestros defensores estudiantiles.
Finalizando, los invito a que reflexionen su voto, que no se dejen llevar por cuestiones banales (carisma, número de amigos, posición social, etc.) sino que evalúen racionalmente a los candidatos en función de otras variables como su desempeño escolar, su capacidad de negociación, su manera de solucionar problemas, entre muchos otros aspectos; lo que queremos que hagan, es que actúen de manera objetiva ante situaciones que podrían afectar su desempeño académico durante su estancia en la facultad.
Ser más eficientes nos llevará a puntos óptimos que permitan el bienestar de la sociedad estudiantil. – AEEUV>>>


Antonio Ariel Guevara Gutiérrez
Estudiante de Séptimo semestre
Facultad de Economía
Universidad Veracruzana

lunes, 22 de septiembre de 2008

PATRONATO

Hubo reunión del patronato de la facultad. Fué para instalarlo y para darle forma al primer proyecto que es la actualización del centro de cómputo de la facultad. El patronato es el que se encarga de gastar o invertir el dinero de las aportaciones que hacemos todos los alumnos en cada inicio de semestre y es para uso de nuestra facultad.

Dentro de este patronato los alumnos tenemos un representante de cada carrera, que es uno de Geografía y uno de economía. En condiciones normales, quien va a las reuniones de este patronato es el Consejero alumno en el caso de economía, pero como todavía no tenemos, mandaron a llamar a algún representante de generación que hiciera las funciones correspondientes de forma provisional. Esta vez fué Everardo Paíz de la 5ta generación.

En la junta, se revisó la lista de posibles compras para el centro de cómputo. Resultó muy importante que ya tuviéramos algunas ideas surgidas de la 1a asamblea de alumnos porque ahí se pudo hacer que fueran escuchadas por los integrantes del patronato.

Uno de los aspectos importantes es que podemos conocer la lista de compras y dar nuestra opinión como alumnos a través del representante. El ambiente adentro de la junta fué muy constructivo, lo que nos muestra la oportunidad que tenemos de hacer algo si nos organizamos y aportamos nuestro granito de arena.

Otro resultado concreto de esa junta fué que se escucharan las ideas que tenemos acerca de mejorar la manera de operar de nuestro centro de cómputo. Se acordó que se revisara la posibilidad de hacer la entrada de una nueva manera, para lo que pedimos la ayuda de todos los que puedan aportar ideas para hacer una propuesta en forma. Es posible que se haga una pequeña red interna y que quede el servicio "tipo Cibercafé", pero el compromiso es que los alumnos busquemos cómo se haría.

Por favor ayuden!! es una buena oportunidad para empezar a hacer algo para mejorar nuestra facultad en algo concreto!!! CUALQUIER IDEA ES IMPORTANTE.

No tiene que ser tan complicado, a lo mejor tu conoces a alguien que sabe cómo se instala un cáfé internet o a lo mejor has escuchado algo del tema, lo importante es colaborar aunque sea con lo que aparentemente es poco pero que nos puede hacer llegar a algo bueno.

Hagan comentarios de esta entrada si quieren participar.

domingo, 7 de septiembre de 2008

¡Bienvenidos!

Te presentamos a nuestro nuevo blog para los alumnos de la Facultad de Economía de la Universidad Veracruzana.

Es un nuevo canal de comunicación entre todos los que integramos nuestra comunidad estudiantil con un carácter abierto, propositivo, plural, ágil y entretenido.

Lo que aparezca aquí saldrá de las iluminadas mentes de quienes habiten o pasen por nuestra querida facultad (estudiantes locales e invitados y, ¿por qué no?, hasta los profesores y personal administrativo).

Esperamos y deseamos que todos participen en él con ideas, críticas, links, documentos, tareas, promoción de actividades (intramuros o extramuros, diurnas o “nocturnas”), comentarios y lo que les interese y quieran compartir con nuestra comunidad.

Recuerden que en la facultad es donde pasamos la mayor parte del día durante por lo menos 4 años y va a ser una etapa inolvidable… procuremos hacerla lo más especial posible fomentando el compañerismo, la solidaridad, el apoyo, la amistad y tantas cosas que nos pueden hacer diferentes de las demás facultades.